Quizás haga hoy un año en el que empezamos a hablar para despedirnos, cuando entre metáforas se escondía un taller y unas ilusiones que más tarde quedarían pequeñas y casi olvidadas.
Puede que haga un año en que el "what" dejó de ser wat para convertirse en wot.
Cómo pudo cambiar todo en tan poco tiempo. Parece que el destino (si es que existiera) está de mi lado. No tengo ni idea de lo que he hecho bien, no sé hasta qué punto ha dependido de mí. Ni siquiera sé si ahora soy yo o eres tú el que me hace ser. Todo es demasiado fácil. Es posible que sea el tiempo que nos ha tocado vivir, o incluso el vivir en el justo medio entre dos casas. Es virtud, tal vez interés (sin connotaciones negativas).
Es como si una frase fuera a predecir todo lo que estaba a punto de pasar... give me your wings, I will learn to fly. Hace tiempo que dejé de creer en las casualidades, y empecé a hacerlo en las casualidades provocadas.
Da igual. Ya no importa el cómo fue, ni el qué pasará.
Es ilógico "pero me encanta"
No hay comentarios:
Publicar un comentario